lunes, 17 de noviembre de 2014

LOS CONSEJOS DE DON SIXTO BARRERA



Una tarde estaba yo platicando con don Sixto Barrera acerca de mi caballo el CAPULIN.
Entonces el me empezó a dar algunos consejos de cómo debía yo de tratarlo:

A los caballos hay que ponerles mucha atención, entonces cada vez que regreses de una charreada, o de una práctica dominical, o simplemente, porque saliste a montar en él, haz estas cosas sencillas:

Antes de meterlo a su pesebre, aflójale el cincho de la montura y paséalo por lo menos unos cinco minutos, quítale freno y que camine detrás de ti esos cinco minutos, jalándolo con un bozalillo, cuando puedas dale un terroncito de azúcar para que aprenda a seguirte.
Luego quítale la montura y con el suadero quítale el sudor del lomo.

Enseguida cepíllalo, y mientras lo haces, acaríciale la crin y las orejas. Revísale el hocico y checa que no traiga heridas por el freno.

Revísale sus cascos y las herraduras, que no traiga algún clavo flojo.

Mételo a su pesebre y dale un poco de agua. Ponle poca alfalfa acicalada, y dale un poco de avena en grano, acuérdate que la avena en hojuela es solo para los niños, la avena en grano trae mucha fibra. Luego déjale el agua suficiente para que beba. Él beberá hasta que quede satisfecho.

Luego tú, vete a bañar y a cambiar, y antes de que te recuestes para descansar regresa al pesebre, para revisar que esté bien y siempre háblale bonito.

Si cada vez que regreses haces estas cosas sencillas, tu penco va a saber que tu lo quieres y lo respetas.

Así de sencillo era don Sixto Barrera.   

viernes, 14 de noviembre de 2014

NO NADAMÁS ACTUANDO EN LA ESCARAMUZA



La mujer Charra no deja huella en la vida montando, sino también con un trabajo sin precedente como el de Laura Del Bosque que durante su reinado de 2009-2010 dejó huella a través de su programa "La Familia Charra contigo" respaldando de manera altruista a diversas instituciones como asilos, hospitales, casas hogar encaminando donaciones en metálico y en especia a grupos necesitados y vulnerables, de tal forma que en su momento la charrería federad y la afición y las escaramuzas se unieron a su noble causa y no solo eso, su esfuerzo y entrega trascendieron a tal grado que el sábado 11 de octubre de 2014 fue objeto de merecido y emotivo reconocimiento por parte del comité organizador del Torneo "Trayectoria Charra" en el lienzo Rancho Santa María de Arandas por cuenta del Tequila "Viva México".

Así, nuestra queridísima Lau, sigue recibiendo muestras de reconocimiento por su intensa y positiva labor y sigue en nuestros corazones por su carisma y gentileza, además está presente en la charrería por su aportación con el manual de atuendos que ha sido un exitazo y es de gran utilidad entre las damas charras y escaramuzas para aprender el uso correcto y propio de los diferentes atuendos. 

Felicitamos a Lau y a su familia y a la vez a José Manuel Vivanco por la iniciativa de homenajear a Laura Del Bosque.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

CUANDO LOS PEQUES SE VUELVEN CHARROS

Normalmente en todas las Asociaciones de Charros, se le pone mucha atención a que los niños y las niñas, vayan aprendiendo las suertes charras.



Ellos, desde que tuvieron uso de razón, vieron a papá y a mamá montados a caballo. 

Asistieron a las charreadas, y admiraron la destreza de sus padres, montados a caballo.

Por esto, en todas las Asociaciones se organizan las escuelas de Charrería, porque esta tradición es heredada de padres a hijos que nos identifica como Mexicanos.

Lo primero es aprender a montar en sus cuacos. Siempre deberán de portar el traje de charro, o el vestido de Adelita.



Las niñas, lo primero que quieren hacer es formar una pequeña escaramuza, pues se emocionan con las maniobras del “Carrusel” que ejecutan las chicas mayores.

A los niños, les atrae el floreo de la chavinda, por eso los veremos con una reata en la mano.



Para cuando ya tienen cierta destreza para conducir a su penco, los profesores charros, los acercan a los toros, y así poco a poco se animan, a efectuar los primeros pasos del coleadero.



A muchos jovencitos les atrae el baile folklórico, por eso aprenden a bailar, y así ellos son los que engalanan cada charreada, cuando el del micrófono grita: “Saquen las tarimas”



Gracias a estas escuelas de Charrería, se cumple con los siguientes objetivos:

1.- Se fomenta, difunde y dignifica el ejercicio de la Charrería en todas sus manifestaciones.

2.- Se da un correcto conocimiento acerca de: Las costumbres charras, la vestimenta, las cabalgaduras y todo lo relacionado con este deporte nacional.

3.- Se estimula el cariño y los cuidados que se deben dar a todas las cabalgaduras.

4.- Se impulsan las prácticas, concursos, torneos, competencias esperando la premiación a su actividad charra.

5.- Se logra a través de estas escuelas charras, no nada más una acción deportiva, sino que se enaltecen los valores del mexicano.

Por eso invitamos a todo charro y charra que impulsen esta linda actividad en sus hijos.


martes, 4 de noviembre de 2014

CUANDO LOS CABALLOS DESFILAN, ESTO ES LO QUE ESCUCHAN

Las marchas que escuchan los caballos cuando desfilan…

Para los caballos de los soldados: LA MARCHA DRAGONA



Durante los tiempos de la colonia se crearon regimientos de dragones Dragón de cuera para defender la Nueva España.

Eran mayormente jinetes de las provincias.

Durante y después de la guerra de independencia los dragones han desempeñado un papel importante en los conflictos militares dentro del país como la batalla de Puebla durante la intervención francesa, hasta la revolución mexicana.

Una de las marchas militares más conocidas en México es la marcha dragona la única usada actualmente por la caballería y las unidades motorizadas durante el desfile del 16 de septiembre para conmemorar el día de la independencia.

Para los caballos de los charros: LA MARCHA DE ZACATECAS



La Marcha Zacatecas es obra del compositor Genaro Codina, nacido y muerto en Zacatecas, de oficio cohetero y arpista de afición.
El maestro Codina compuso la Marcha Zacatecas en el año de 1892 y fue tocada por primera vez en público en la primavera de 1893, por la Banda del Estado, que era dirigida por Fernando Villalpando y reforzada por la Banda de Niños del Hospicio, además de una banda de guerra. El mérito de la instrumentación de la marcha corresponde a Fernando Villalpando.
Por su aceptación y frecuente interpretación en actos oficiales, está considerada como el segundo Himno Nacional Mexicano, así como el Himno Nacional de la Charrería mexicana.